Para los que os habéis unido ahora, empezad por aquí
Ah!Y si os gusta... comentad!!

10 febrero 2012

Érase una vez una obra

Hola!!

Como bien dice el título, voy a contar lo que nos pasó durante unas obras que estaban haciendo en la comunidad, ya que seguramente sea algo que hemos vivido la gran mayoría, solo que fue un poco peculiar para nosotras...

... Una mañana, tras una circular previa avisando que comenzarían las obras de las bajantes que pasan por el baño del edificio, ahí estaba yo esperando para abrir la puerta a los albañiles y tal. Como iba por todas las casas a la vez, en teoría sería cosa de poco tiempo cada día. Así que, esa misma mañana había quedado con dos compañeras de clase para hacer un trabajo para la universidad.

Hasta aquí, nada fuera de lo normal. Llegaron los albañiles, pusieron todo el camino hasta el baño con unos cartones para no rayar el suelo, llegaron mis compañeras de clase y nos pusimos a lo nuestro. Los albañiles mientras pues entraban y salían a lo suyo también.

De pronto, tocan al timbre y hay una caja de cartón gigante. Preguntan por mí y me dicen que es el frigorífico que pedimos, tras una conversación larga porque evidentemente yo no había pedido nada jajaja y decirme que ya estaba pagado, le dije que lo pusieran en la cocina. Y de regalo llevaban también una campana extractora que no me habían dicho. Resulta que la universidad lo había pedido porque hacía un mes les dijimos que estaban rotos.

Así que ahí me quede en la cocina con nuestros dos frigos (uno roto) otro sin desembalar en mitad de la cocina, aquello parecía una rotonda, y una caja más pequeña con una campana extractora. Y por supuesto los albañiles en el baño y mis compañeras de clase en el salón. Los señores que habían traído estas cosas decían que ellos no eran los que se llevaban el viejo, y con las mismas...se fueron.

Al poco rato, abren la puerta (con el pitorreo de siempre), resulta que una vez al mes, pero sin que sea un día en concreto, la universidad manda una limpiadora a todas las casas y justo había tocado ese día. Por supuesto entró sin llamar, empieza a ser costumbre.
Le dije que estábamos de obras y que quizás iba a ser más una pérdida de tiempo porque a los 5 min iba a estar todo otra vez sucio. Pero la mujer se empeñó y ahí se puso ella manos a la obra, fregando encima de los cartones que los albañiles con tanto esmero había colocado.

Volviendo a mis cosas, al poco tocó una chica que venía a la revisión mensual del gas (se me había olvidado!) y justo detrás, sin llegar a cerrar la puerta, otro señor que venía a instalar la campana extractora. Así que nada, todo el mundo en la cocina (sin olvidar el frigo en todo el centro haciendo de rotonda): La limpiadora, la del gas y el señor de la campana extractora, sin olvidar los albañiles entrando y saliendo y mis dos compañeras de clase en el salón.

La puerta se solía quedar abierta porque total, no paraban de entrar y salir los albañiles y en una de estas ocasiones, me fijo que entra una señora mayor que tampoco conocía de nada y con toda la soltura del mundo se mete hasta el salón sin saludar ni decir nada. Me levanté corriendo a ver quién era ella y qué quería. Resulta que era una vecina, cotilla, que quería ver exactamente en que consistía la obra ya que a la semana siguiente le tocaba a todas las puertas de su lado. Y bueno...de perdidos al río le dije que se metiera que estaba todo al fondo.
Lo que sí, cerré la puerta ya que había visto que no era una buena idea del todo.

Pero por si no fuera poco, al poco tiempo después volvieron a tocar al timbre, ya sin preguntar abrí la puerta pensando que sería algún albañil que se había quedado fuera. Y me encuentro con una chica, con una carpeta que me habla en inglés enseñándome en la carpeta unos planos de nuestra casa. Entonces me doy cuenta de que sí! es otra chica de tantas que venían a ver el piso! jajajaja por si éramos pocos, vino en el mejor día.

La chica era de Palestina y como pude le expliqué que esto normalmente no era así y que toda esta gente no era del piso jaja. Tras ver lo que pudo de la casa me dijo que el 1 de diciembre se instalaba con nosotras (estábamos a finales de noviembre). Y bueno esa fue la última vez que la vimos jaja como casi todas las que venían a ver el piso nos decían que si pero luego nunca más aparecían.

Poco a poco llegó la hora de comer y la gente fue terminando y marchándose del piso. Y así, fue como ocurrió y como viví nuestra primera obra en este piso.

Un saludo!!

1 comentario:

  1. Marta me parto!!!! pero por dios santo!! eso es el camarote de los hermanos MArx!!! porque te conozco que si no creeria que te lo inventas!!! es subrealista!!
    Lo de que la de la limpieza no toque!! vaya tela!! a mi me pasa igual y la cosa termino...te dejo el enlace por si quieres leerlo http://conversacionesfrentealespejo.blogspot.com/2012/01/hoy-enme-quedo-muerta-mariii.html

    besos!!

    ResponderEliminar